Ciclo reproductivo de la hembra canina
Para que una hembra sea receptiva sexualmente ocurren ciertos procesos previos, primero una fase de preparación llamada proestro que en la hembra canina se presenta con sangrado, inflamación y enrojecimiento de la vulva, puede durar entre 5 a 14 días (promedio 9 días) este periodo termina cuando la hembra se deja montar en cuanto sucede esto se inicia el estro o celo es el periodo de receptividad sexual de la hembra al macho, su duración es entre 5 a 10 días en esta etapa el sangrado vulvar disminuye la vulva se ve más aumentada de tamaño y es el periodo fértil de la hembra, esta se pone inquieta , aumenta el consumo de agua y orina frecuentemente, terminado este periodo se presenta el diestro tiene un tiempo de duración de 60 días, las hembras pueden engordar y están más tranquilas, si la hembra no quedo gestante puede llenar la glándula mamaria y anidar objetos conociéndose este suceso como seudopreñez, pero si la monta es preñada en este tiempo transcurre la gestación , el parto y la lactación ; el último periodo es el anestro es el tiempo comprendido entre el diestro y próximo celo , en este no presenta ninguna manifestación reproductiva
La gestación
Este periodo tiene una duración entre 58 a 63 días, la hembra aumenta su apetito, aumenta su silueta abdominal, en ocasiones se tornan más afectivas con sus amos, o agresivas en casos que convivan con otras mascotas, para este periodo se deben tener ciertos cuidados especiales como lo es la alimentación, la actividad, el estado de salud de la hembra; es pertinente hacer un diagnóstico preciso de la gestación este se puede hacer mediante varios métodos como lo es la palpación abdominal, luego de los 35 días sin embargo para esto el médico debe tener mucha pericia para el diagnóstico, otro método es la radiografía que se puede realizar desde los 40 días de gestación, el último y más óptimo la ultrasonografía o ecografía que se puede realizar a partir del 21 día de gestación, con este se puede dar una edad aproximada de gestación y posible fecha de parto, además se puede evaluar la viabilidad de los fetos, sin embargo el número exacto de la camada es difícil de evaluar; teniendo en cuanta estos factores se espera que la gestación llegue a término y se desencadene el parto o se prepare la hembra para la cesárea.
Parto y lactación
Las hembras se deben familiarizar con el sitio donde van a parir entre tres a cuatro días antes del parto, así generar un estado de confort en este momento, en ocasiones se comete el error de acomodarlas en el sitio del parto en que se están expulsando las crías esto genera un factor de estrés para la hembra.
El desencadenamiento del parto inicia 12 horas antes del parto, se presenta una disminución de la temperatura, la hembra se nota inquieta, busca lugares donde esconderse, rasca el piso, se anida acomodando trapos o papel que le debemos proveer para que ella acomode su cama, posteriormente se inicia la expulsión de fetos mediante contracciones uterinas, lo que se debe esperar entre la expulsión de una cría y otra es de aproximadamente una hora a una hora y media, en caso de que se presenten complicaciones al parto (Distocia) se debe buscar la asistencia medica veterinaria la cual en ocasiones se puede resolver mediante maniobras obstétricas o en caso tal se debe realizar cesárea a la hembra gestante.
La lactación en este periodo para la hembra poder suplir los requerimientos nutricionales de las crías y de ella necesita una alimentación de buena calidad y de mayor cantidad a la que consume normalmente, este periodo comprende un tiempo entre 30 a 40 días, en este periodo la hembra también debe tener abundante agua de bebida.
La alimentación
En el estado de gestación las hembras caninas tienen requerimientos nutricionales más altos que el resto de su vida, se debe proveer a la nueva madre de alimentos balanceados que tengan requerimientos nutricionales óptimos para cada una de las especies, una opción es el alimento para cachorros debido a su composición nutricional, la cantidad diaria y el tipo de alimento se debe determinar teniendo en cuenta el peso y la raza de la hembra, esto se debe hacer con la asesoría de un médico veterinario al inicio de la gestación se debe alimentar como mínimo con dos raciones al día, posterior a la tercera semana de gestación se debe racionar el alimento en más de dos raciones debido a que el útero aumenta de tamaño por la presencia de los fetos y este no permite el ingreso de grandes cantidades de alimento al estómago; en la lactancia los requerimientos nutricionales pueden incluso más altos que en el periodo gestacional, por tal motivo las raciones pueden ser más y además se puede suplementar la hembra con un multivitamínico o con minerales para ayudarle a suplir la necesidad nutricional
Mary Jeanne Montoya Velásquez
Medico Veterinario y Zootecnista
Universidad de los Llanos
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